Las cifras del paro en España llegan a cotas preocupantes y vergonzosas. Más de 2.400.000 personas sin empleo es un claro y duro reflejo de que la situación económica por la que pasa el país es muy grave. Sin embargo, los esfuerzos gubernamentales siguen enfocados, más que a su solución, a tergiversar las evidencias y buscar palabrejas que, por incomprensibles, puedan influir en la opinión pública conformándoles un criterio de esta situación totalmente distinto de la cruda y patente realidad.
En estas fechas estivales, ni el sector hostelero genera empleo temporal que venga a maquillar, al menos de momento, como venía ocurriendo en los últimos años, las alarmantes cifras de parados. Es un claro ejemplo de que la situación es mala en la actualidad y que a futuro inmediato nos esperan tiempos bastante peores.
Sin embargo, el vicepresidente del gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Sr. Solbes, metido ya de lleno y sin disimulo en la dinámica de la mentira y el desenmascarado ninguneo de la situación económica, manifestaba ayer que en España trabajan más personas que nunca. Es una teoría ya manifestada por el presidente Zapatero que, inexplicablemente ha asumido el Sr. Solbes que, hasta el comienzo de la presente legislatura, era considerado por la mayoría de la ciudadanía española un hombre ecuánime, serio y gran experto en economía, hasta que, vaya usted a saber porque oscuras razones, se subió al carro de la irrealidad, la mentira y el timo por el timo.
El gobierno es notorio que ha fracasado y se está hundiendo víctima de sus propios engaños. Una mentira muchas veces repetida, llega, para algunos, a convertirse en verdad, y eso es lo que le viene ocurriendo al ejecutivo. De otra manera no se explica la actitud del Ministro de Economía que tal parece que ha sido hipnotizado por el “encanto y atractivo” de este trilero que tenemos como presidente del gobierno.
Mal vamos a superar la crisis económica que está engrosando de forma vertiginosa las listas del INEM, si esta gente no despierta de su sueño y acepta la cruda realidad con todas sus consecuencias.
El Gobierno se fue de vacaciones con el curso suspendido y le esperan muchos frentes abiertos para Septiembre. En estos frentes los distintos ministros y ministras deberán dar la talla de su valía y profesionalidad, si es que la tienen.
Zapatero gastó mucha pólvora en la composición de su gabinete, tratando de igualar o superar la cuota de féminas entre sus ministrables, olvidándose de que los cargos ministeriales deben ser ocupados por personas capaces, sean hombres o mujeres y no por “cosas” que, simplemente, representan no sé que “cosas”, pero que a la postre resultan incapaces y ciegos ante las preocupantes realidades nacionales.
Más de 2.400.000 personas sin trabajo, que supone ya casi el 12% de la población activa, es el vergonzoso resultado de una política hecha por impulsos e improvisaciones, sin ningún contenido programado y totalmente fuera de la realidad.
El gobierno, mientras, descansa, y dicen que medita sobre la situación. Miedo me da que vengan con las pilas cargadas porque estos, cuando tienen ideas, es para ponerse a temblar.
Hay ministros a los que, prácticamente, se les desconoce. No han hecho nada de nada y casi estoy por asegurar que son los mejores del gabinete. Vale más que no hagan nada porque lo que tocan lo deshacen. Al menos, de estos no se acordará nadie.
Un famoso torero que en una tarde desastrosa fue cogido gravemente por el toro, preguntaba a uno de sus peones qué decía el público de él. De usted nada, le contestó. Todo lo que se oía era sobre su padre y sobre su madre de usted. Pues eso…
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