Posada de Llanes se queda, definitivamente, sin la ESO en sus escuelas.

Nadie, de los que les podían haber ayudado, lo ha hecho. Los poderes les han vuelto la espalda y no han querido escuchar sus justas reivindicaciones.

En este caso, ha vuelto a quedar patente una vez más, que los partidos políticos gobernantes, no están para ayudar a sus conciudadanos ni a los intereses de su concejo. Están sólo y exclusivamente, para apoyar sus propios intereses y los del partido que los sustenta.

Yo, ya lo había augurado porque algo parecido había sufrido mi pueblo, Panes, no hace muchos años. Lo advertí en este espacio, y lo más que me dedicaron fue alguna “cariñosa” frase de reproche a mis avisos.

Es lamentable que algunas fuerzas políticas, en vez de luchar por los necesarios e imprescindibles avances sociales que todo pueblo demanda y se merece, lo hagan por lo contrario, por el retroceso y la inferior calidad de servicios de sus gobernados.

¿Merece, entonces, la pena, romperse los cuernos por las calles buscando apoyos y votos para los que nos mienten una y otra vez; para los que abandonan la nave cuando soplan vientos desfavorables a nuestros intereses vecinales; para los que nunca van a dar la cara por nosotros por no poner en peligro sus poltronas?

Pues esto es una situación que requiere una profunda y sosegada meditación, y análisis desapasionado. Siempre se dijo que no da buenos resultados votar opciones políticas con el corazón, que se debe elegir siempre con la cabeza. Nosotros, es posible que tengamos mucho corazón y poca cabeza y los resultados de ello no nos han sido favorables, como era de esperar.

En cualquier caso, aquí no se acaba la vida. Esto ha sido una lección más que la propia vida nos enseña pero que hay que asimilar y poner en práctica los conocimientos que esta lección conlleva.

Una caída, aunque de graves consecuencias, puede enseñarnos a caminar, a futuro, con seguridad y a no tener más tropiezos.

Los niños de Posada tendrán que ir a Llanes u a otros Institutos a realizar sus estudios. Es lamentable, pero superable. Duele, pero hay tratamientos que lo pueden aliviar. También puede ser este hecho, enriquecedor, primero para los padres que han luchado en vano por unos derechos justos para sus hijos que nos les han sido reconocidos, pero también para esos jóvenes y niños que hoy se han visto privados en propia carne de esos derechos fundamentales.

En sus manos va a quedar, y pronto, el protagonismo y la fuerza para que hechos tan lamentables y, si me apuran, tan vergonzosos, no vuelvan a producirse en nuestros pueblos.

En sus manos va a quedar, que quien les gobierne en un futuro, vuelquen todo su interés en la prosperidad de su concejo, y no en la conveniencia de sus objetivos personales o de partido, porque esto es una bofetada a quienes, en su día, depositaron una confianza ciega en ellos, que hoy no han tenido el menor recato en traicionar.